lunes, 22 de octubre de 2007

La Musica Barroca

La música barroca es el estilo musical relacionado con una época cultural europea, que abarca desde el nacimiento de la ópera en el siglo XVII (aproximadamente en 1600) hasta la mitad del siglo XVIII (aproximadamente hasta la muerte de Johann Sebastian Bach, en 1750).

Se trata de una de las épocas musicales más largas, fecundas, revolucionarias e importantes de la música occidental, y la más influyente, probablemente su característica más notoria sea el uso del bajo continuo y el monumental desarrollo de la armonía tonal, que la diferencia profundamente de los anteriores estilos modales.

Origen del término

El término barroco (voz portuguesa que denota una perla de forma irregular) se tomó de la arquitectura (donde significa algo «retorcido», una construcción «pesada, elaborada, envuelta» aunque también es barroco algo recargado de ornamentos). En el siglo XVIII se usó peyorativamente para describir las características del estilo musical del siglo anterior, que se consideraba «tosco, extraño, áspero y anticuado».

Características

El estilo hoy llamado "barroco" se caracteriza estéticamente por la preeminencia de lo emocional sobre lo racional, por el estilo vocal recitativo, en el cual el ritmo de la palabra determina el discurso melódico - donde "la música ha de ser sirviente de la poesía" - y por un auge de la música instrumental pura, es decir, sin relación con consideraciones ideológicas que se deriven de un texto, o funcionales como en el caso de la música de danza.
En esta época se desarrollan la
sonata, el concerto grosso y el ballet francés.

A diferencia de épocas anteriores, la música sacra y la música profana conviven armoniosamente, formando parte de la profesión musical. La mayor permisividad estética lleva a que la interpretación musical tienda a enriquecer las partes mediante una profusión de ornamentos y recursos expresivos.

Tienen gran importancia la teoría de los afectos, que considera a la música como creadora de emociones, y la retórica, que transfiere conceptos de la oratoria tradicional a la composición del discurso musical del barroco.

Las etapas del Barroco musical

El barroco temprano o primitivo (1600 - 1650)

Este período es conocido como el seicento: alrededor del año 1600 se destaca en la historia de la música un compositor de inusual talento, Claudio Monteverdi. Fue un maestro de los dos estilos entonces preponderantes: la prima prattica o estilo polifónico del madrigal y la seconda prattica o estilo recitativo de música vocal solista. Compuso una de sus obras más famosas, el "Lamento d'Arianna", tanto en versión polifónica como en versión para solista y bajo continuo. Monteverdi fue posteriormente, junto con Antonio Vivaldi, uno de los dos compositores más asiduamente estudiados por Johann Sebastian Bach.

La seconda prattica, un estilo de monodia acompañada, esto es, una o varias voces solistas y bajo continuo, caracteriza el nuevo estilo musical de este período.

El barroco medio (1650-1700)

El barroco medio comprendido entre el 1650 al 1700. Sobresalen en este período el compositor inglés Henry Purcell (1659 - 1695) y su contemporáneo alemán Johann Pachelbel (1653 - 1706).
El barroco tardío (1700-1750)

El Barroco Tardío está comprendido entre 1680 y 1730. Los compositores característicos de este período son Domenico Scarlatti en Italia, Georg Friedrich Haendel en Inglaterra, en Alemania Johann Sebastian Bach y en Francia Jean Philippe Rameau..
La transición al clasicismo (1740-1770)

Son varias las tendencias estéticas a finales del barroco: el estilo galante francés desde 1730, el desarrollo en Italia de la ópera buffa, la sonata y la sinfonía y el estilo rococó conforman entre 1740 y 1770 una suerte de preclasicismo.

Carl Phillip Emmanuel Bach(1714-1788), uno de los hijos de Johann Sebastian, es considerado el padre de la sonata clásica.

El auge de la música instrumental

La música instrumental, que en la época anterior dio el primer asomo en la música académica, en los siglos XVII-XVIII verá un gran auge sin precedentes. En esta época la música vocal e instrumental están en plena igualdad por primera vez en la historia de la música, donde la instrumental cobra su primera madurez, un gran florecimiento y época dorada precedentes en géneros, técnicos, intérpretes y compositores que rozan un profundo conocimiento de los instrumentos.

El cultivo de la música puramente instrumental lleva a un importante desarrollo de la técnica, al servicio de una fuerte expresión emocional. Se destaca el caso del violinista Arcangelo Corelli, quien según el testimonio de François Raguenet, cuando tocaba en publico "perdía el dominio de sí mismo", tenía los ojos enrojecidos y, no obstante todo esto, lograba expresarse a la perfección.

La sonata barroca - que no debe ser confundida con la sonata clásica de forma sonata - denota una composición para uno o dos instrumentos de cuerda o viento y bajo continuo, dividida en tres o cuatro movimientos de carácter contrastante, típicamente allegro - adagio - allegro (sonata da camera) o adagio - allegro - adagio - allegro (sonata da chiesa). La alternativa contrastante de movimientos sucesivos es herencia de la suite o serie de movimientos de danza, que típicamente alternaban una danza baja o de paso, más lenta - como la pavana - con otra alta o de salto, más rápida - como la gallarda.

De un modo equivalente a la sonata, la cantata es una composición para canto solista y bajo continuo, cuya estructura típica es recitativo - aria da capo. El equivalente en la música para instrumentos de teclado es la toccata.

El barroco fue una época de esplendor de muchos instrumentos como el violín, el clavecín y el órgano, cultivándose intensamente la música de cámara para grupos instrumentales con acompañamiento de bajo continuo.

Además, aparecen intérpretes virtuosos que explotan al máximo el instrumento por su gran destreza técnica, como Johann Sebastian Bach y Dietrich Buxtehude en el caso del órgano; Domenico Scarlatti, Jean Philipe Rameau y François Couperin al clavecín; Gottfried Reiche (1660-1734) a la trompeta; y Antonio Vivaldi, Arcángelo Corelli y Giuseppe Torelli en el violín.

La Triosonata

La heredera del estilo polifónico renacentista y la principal forma de cámara del barroco, es una sonata para dos partes instrumentales - tradicionalmente violines - y continuo. Se destacan las obras de Corelli, Pergolesi, Sammartini, Händel, Buxtehude y Bach.
El concerto grosso
A mediados del seicento, se convierte en el género instrumental más típico de la época. A diferencia de la música de cámara, cada parte es ejecutada por más de un instrumento, como ocurre típicamente en la
orquesta. La ejecución a tutti alterna con pasajes a soli a la manera de la triosonata.

Importantes centros del estilo instrumental concertante son Módena, Bologna y Venecia.

La época dorada del clavecín, la viola da gamba y el órgano

En esta época el
clavecín, el órgano, la viola da gamba y el laúd vivirán su gran época dorada a nivel técnico, interpretativo y compositivo. La etapa final del barroco (1700-1750) será el cenit y el ocaso del clavecín, y la viola da gamba para, después, en la segunda mitad del s. XVIII caigan en el olvido y queden totalmente relegados por sus descendientes, el violín, el violoncello y el forte-piano, ya en la época clásica.
El laúd, el instrumento renacentista por excelencia, caerá en el olvido antes, por 1690-1700, viéndose desplazado por la guitarra y el clavecín. El órgano, no caerá en el olvido como los otros instrumentos, pero ya no se conocerá un gran auge como en esta época.

El órgano

El órgano inicialmente tiene ilustres exponentes en toda Europa en el principio del período, donde su música empieza a conocer su edad dorada por su destacable calidad.
En la primera mitad del siglo XVII los compositores más destacados son
Jan Pieterszoon Sweelinck (en Holanda); Girolamo Frescobaldi (en Italia); Samuel Schein H. Schiedermann (en Alemania); Correa de Arauxo (en España), y Jean Titelouze (1563-1633, en Francia). Hacia 1650, el órgano entra en decadencia en Italia y en Países Bajos, donde el instrumento no conocerá más compositores de talla internacional.

En la segunda mitad del siglo XVII los compositores más destacados son Dietrich Buxtehude (1632-1707), que es el más notable en esta generación, Johann Pachelbel (1653-1705), Georg Bohm (1661-1733) Johann Caspar Ferdinand Fischer (c.1665-1746) y J. A. Reincken (1623-1722) en Alemania; François Couperin (1668-1733) en Francia; Henry Purcell (1659-1695), en Inglaterra, y Juan Cabanilles (1640-1712) en España. A partir de 1710-1720 el órgano entra en decadencia en Francia, por lo que en la última etapa del barroco no habrá ningún compositor nacional notable.

En la primera mitad del siglo XVIII, la última etapa del barroco, en Alemania el órgano vivirá su máximo esplendor para después iniciar una decadencia a partir de 1750 a nivel general. En Alemania J. S. Bach (1685-1750), representa el máximo apogeo del órgano barroco, donde la Toccata y fuga en re menor BWV 565 (1708) es la más famosa y conocida obra para este instrumento. En España es notable Antonio Soler (1728-1783) y en inglaterra, desde 1712 G.F.Händel (1685-1759), William Boyce y Cristan Arne, los tres por el concierto para órgano solista y cuerda.

El clavecín

Rameau, Couperin, Johann Sebastian Bach, Handel y Scarlatti son los más destacables en el ámbito del clavecín de la primera mitad del siglo XVIII, donde representan el máximo apogeo de la música clavecinística barroca.

Rameau y Couperin son los máximos exponentes de la escuela francesa. Cabe mencionar los 4 libros de órdenes (1713, 1717, 1722 y 1730) de Couperin y los libros de suites (1706, 1724 y 1728) de Rameau, que es la cumbre de la música barroca francesa para teclado.

Domenico Scarlatti es el máximo exponente de la música italiana para teclado. Lo más destacado son sus 555 sonatas, donde con ellas innova y se anticipa en la música de teclado de finales del siglo XVIII de Haydn y Mozart. Tiene también una gran selección de preludios y fugas los cuales son una gran opción para ejercitar la técnica del teclado.

Haendel es el máximo exponente del barroco inglés para teclado. Destacan entre su obra las 8 grandes Suites(1720), una de las cumbres de la suite para teclado.

J. S. Bach es quizá el compositor más destacable de todo el período, donde sus obras El clavecín bien temperado (BWV 846-893), las Variaciones Goldberg BWV 988 y El arte de la fuga son un antes y un después de la música de teclado en general y la cima de la literatura clavecinística barroca. Bach, aunque vivió en las acaballas del Barroco y en su época no fue muy reconocido, dejó tras de sí un gran repertorio de preludios con fugas que aun ahora son de las obras más selectas que hay. Un hecho curioso es que la Pasión según San Mateo sólo se tocó el día en que se celebraba ese motivo religioso. Pasaron casi dos siglos hasta que Felix Mendelssohn (compositor romántico) no la descubrió, no se volvió a tocar nunca más en ese período. Es una mera casualidad que Mendelssohn la encontrara ya que si no fuera por él, probablemente ahora no tendríamos esta gran obra.